Verifique que el terreno esté correctamente perfilado tanto en sus colindancias como en excavaciones interiores.

Corroboré que el suelo esté compactado correctamente, logrando una densidad adecuada. Preferentemente contar con una prueba de laboratorio para verificar el nivel de compactación. El grado de compactación debe estar entre el 90 y 95% de la Proctor Modificado (estandar de ensayos de compactación)

Revise que se hayan creado pendientes apropiadas para el drenaje del agua, evitando acumulaciones que puedan dañar la estructura o erosionar el terreno.

Comprobé niveles de acuerdo a las especificaciones marcadas en planería.